martes, 21 de mayo de 2013

Que todavía me haces falta...


Feliz día madres.
Gemita.
Siempre me sentí un afortunado cuando de madres hablaba. Siempre el dicho de “madre hay una sola” no funcionaba conmigo. Siempre me sentí orgulloso de mis 3 mamás.
La que me trajo al mundo, Yrene, quien para darme un mejor futuro se fue en busca de un mejor porvenir, y se fue cuando tenía 8 años. Al principio no lo entendí, pero mientras creces te das cuentas de los sacrificios de tu vieja.
Mi abuela Gemita, mamá de mi papá es mi otra madre. Solo viví con ella 1 año, cuando tenía 6  e hice mi inicial en la selva peruana, en Moyobamba. Por ser el primer nieto y hasta ahora, cada que vez que voy, me trata como a su nieto preferido.
Mi otra mamá y con que tengo un lazo especial es mi mamá Laura, y es que con ella viví los 18 años de mi vida en Lima.
Ella me vio nacer, ella estuvo en mi primer día de inicial, ella estuvo en mi fiesta de promoción de primaria, ella estuvo en mi fiesta de secundaria. Gracias a ella, escuché los primeros carajos que le hacía salir de su boca, los “no vengas tarde”, los” hay carajo, mientras tú estás de ida yo estoy 100 veces de vuelta”, los permiso a las fiestas hasta las 3:00 que generalmente se transformaban en 5:00 am.
 Con mi mamá Laura aprendí muchas cosas, me inculcó valores increíbles que siempre trato de mantenerlos, me enseñó a sentirme orgulloso de dónde vengo, me enseñó  a no dejarme pisotear por cualquier idiota que se me cruzara. A pesar  que ella sabía que era muy dócil, siempre me impulsó a defenderme y sacar cara del barrio de dónde vengo. Es que no le gustaba que me agarren de pavo, nunca le gustó. Siempre me desahuevó y por eso siempre le estaré agradecido. Siempre me habló con la verdad, sobre cualquier tema. Mi mama Laura me hablaba hasta de sexo, con sus palabras sabias, “siempre compra tu poncho hijo”, “cuídate, cómprate tus preservativos” y es que así es ella, directa y frontal.
Cuando me fui a  forjar mi futuro a los 18 años, a otro país, me costó mucho poder alejarme de ella, no quería dejarla sola, pero tuve que hacerlo. Años después regresé, volví a verla, a estar con ella, y parece que el tiempo no hubiese pasado, todavía me sigue aconsejando, todavía a mis 27 años, lloro en su hombro por alguna decepción amorosa, todavía me consuela y me dice que ya encontraré a la mujer ideal.
Hace 1 año que no vivo con ella, decidí vivir solo y aunque ella al principio se sintió mal y triste por mi lejanía, después se dio cuenta que era por mí bien. 
Hoy, ella no está pasando su mejor momento, la vida que a veces es dura, nos dio una cachetada demasiada fuerte, ya  a los 66 años, la lucha que tiene por delante es dura, pero ella sabe que yo seré su sostén, que siempre me tendrá a su lado, que jamás le fallaré, que así como me crió, tiene que criar a su bisnieto, que todavía falta darle el visto bueno a mi futura mujer, que todavía a mí me hace mucha falta, que todavía la quiero abrazar fuerte y decirle que la amo, que todavía quiero que me cocine mi arroz con pollo con papa a la huancaína, que todavía necesito a alguien que me guapee si no estoy haciendo las cosas bien, que todavía necesito sus abrazos…
Laura e Yrene.
La vida te da muchas pruebas, y no tengo dudas que esta es la más fuerte que está tocando, la que más me duele, la que no estaba preparado, pero he ahí donde se ven la fuerza, la verdadera fuerza y hoy, estoy más fuerte que nunca, porque vamos a salir adelante, con fe.
Hoy mami, vamos a luchar juntos.



viernes, 15 de junio de 2012

FOTOGRAFIANDO MOMENTOS.

Hoy cambio las letras por la Fotografía.


El Palacio De Gobierno (Perú)



Centro de Lima


El auto rojo.

























lunes, 2 de abril de 2012

PRIMER CAMBIO, PRIMER ARRANQUE.



Cambios, cambios y más cambios. Uno cuando crece va cambiando, va tomando decisiones, se va equivocando, se va confundiendo, se va alegrando y todo se vuelve un conjunto que a la larga se convierte en la tan deseada madurez.
En mi vida he tomado una que otras decisiones, algunas me han salido bien, otras no tanto, y unas, ni que hablar. Cuando decidí salir de mi país, ya hace 8 años atrás, fue una decisión difícil, pero me sentía convencido de que era lo mejor.  Creo no haberme equivocado, Buenos Aires, ciudad a la que amo mucho, y la que siempre me recibirá con los brazos abiertos, mi segundo hogar,  me dio mi profesión, me dio amigos incondicionales, me dio ilusiones. Siento a veces que no me despedí como debí, que me faltó algo más.
Hoy mi realidad es otra. ¿Si lo soñaba así? Sinceramente, no. Ahora me encuentro en mi país, mi ciudad, me vine por una ilusión que se fue diluyendo mientras pasaron los meses, y que hoy está completamente muerto. Tuve la suerte de conseguir un trabajo, gracias a personas que quiero mucho, como es la Sra Mily, a quién no tengo el gusto de conocerla personalmente, pero que es una dulzura como mujer, como madre, como amiga. Su hija, quién también fue parte de mis logros, y su primo quién me dio la chance de formar parte de una linda familia. Hoy en mi trabajo, siento que no tengo jefes, sino amigos, compinches, y claro que uno se siente a gusto trabajar así.
Hace unas semanas cumplí 26 años. Cómo pasa el tiempo. Y después de escuchar muchas veces a alguien decirme que tenía que mudarme, tomé la gran decisión de hacerlo. Por primera vez viviré solo, bueno, en realidad con un amigo, primo, confidente, pero ya no tendré a mi madre, a mis abuelos al lado. Hoy estaré solo, con mi cama, mi laptop y mi soledad que serán los que me acompañarán en esta aventura. Sólo espero que no sea una equivocación, al contrario, que sea un paso gigante el que esté dando, un giro en mi vida, que me haga más fuerte, más duro, menos sentimental, más realista, pero sin perder la ilusión y menos los sueños.

Cambie mi barrio victoriano, por uno cerca al mar. Caminaré por una constelación, desolada  y media oscura, me reencontraré con los libros, con mi silencio, con mis miedos, con mis llantos, mis alegrías. Y después de todo, espero poder decir, “Que bueno haber regresado”.
Han pasado 7 meses desde que regresé como un loco enamorado, pensando que nada importaba sólo ella. Siete meses después, alguien me dijo: “Mírate ahora, estás más tranquilo, ahora piensas con la cabeza, y no con el corazón, todo vendrá de a poco, todo pasa…”  Y gracias a Dios estoy por ese camino.
Hoy, mi segunda noche, con vecinos nuevos, amigos que son como primos.
Agradecido hasta los huesos. 

viernes, 23 de marzo de 2012

CHAU, HASTA LUEGO BEBE.



Dicen que en la vida todo llega, tarde o temprano llega. A veces quisiera que esa frase no fuera tan cierta, que haya cosas que no lleguen, al contrario, que se vayan más lejos. La tuve que dejar, la tuve que devolver en contra de mi voluntad, es que por tiempo, preocupación, debería quedármela, pero no pude, por más que lo pensé, no podía quitarle el amor de mimi a esa persona que amé tanto.  Siento un pequeño vacío, chiquita como ella.
Ya no llegaré preocupado de mi trabajo para verla, cargarla, besarla, y tenerla en mis brazos por horas, ya no me preocupare ni saldré corriendo al mercado para comprarle su comida, para que no le falte nada en la noche, ya no jugaré con ella en mi cama, ni la agarraré para dormir juntos mientras ella me lame las manos.
Ya no tendré que limpiar jaulas, ni barrer, ni mirar por mi ventana cuando saltas por mi casa, tendré que hacerme la idea que hoy, estás feliz al lado de tu madre, que  pronto te olvidarás de mí, que ya no seré tu papá, que seguramente otro te alzará y estará al lado tuyo, y sí, me da mucha pena. Pero sólo quiero que sepas, que eres  y serás un gran conejita, que empezó toda tímida al momento de llevarte a mi hogar, y que te ganaste todo el cariño de mi familia, que ya eras parte de ella.
Te amo mucho, te quiero a montones, y ojalá me den la oportunidad de volverte a ver, algún día, que sólo sea un hasta luego nada más. 

domingo, 8 de enero de 2012

SIMPLEMENTE LA MIMI.




Hoy cumples un mes a mi lado, es increíble ahora verte correr por casa, verte caminar sobre mi cama. Me pone feliz abrir la puerta, y ver como dejas lo que estás haciendo para venirme a saludar, para darme tus besitos. Yo siempre trato de llegar temprano, sólo para poderte ver, alzar, besar, y decirte que te quiero mucho.
Todavía recuerdo  esa noche  cuando fui a buscarte, no era la mejor  noche para mí, sin duda alguna, era la peor, me sentía muy vacío, devastado, tenía tantas ganas de llorar, pero no lo hice.  Recuerdo que al entrar a la cocina, mire de reojo la parte de al fondo, la puerta medio abierta, y los recuerdos que se esfumaban de a poco. Te tomé en mis brazos por un segundo, y después te metí al bolso, agarré la jaula, tu mochila, y te llevé a mi lado.
Sé que al principio  sufriste mucho, al igual que yo. No tenías ganas de jugar, de correr, de saltar. Yo no tenía ganas de salir, de joder, de reír. Es que teníamos a alguien extrañando mucho. Esa persona ya no estaba a nuestro lado, y su ausencia se notaba cuantiosamente. Sé que al igual que tú, extrañabas su voz, sus caricias, sus besos, sus abrazos fuertes, su boca diciéndonos que nos quería, que nos amaba. Sé que en las noches también sueñas que está a tu lado, sé que la primera noche sentías que estaba cuidándote, y yo sentía que la estaba cuidando.

Jamás tuve una mascota en mi vida, y es por eso que nunca sentí el amor hacía los animales. Bastó días para descubrir el inmenso amor que te tengo, que sé que a la larga, me hará sufrir mucho, cuando te tenga que entregar, cuando vuelvas a tu hábitat, a tu casa, a tu hogar. Sé que ese día me iré desconsolado, me iré triste porque te extrañaré mucho.  
Sé que suena raro, pero me siento como tu padre, atendiéndote, dándote de comer, limpiándote, creo que si Dios me da algún día la dicha de ser papá, pues trataría de ser el mejor de todos. Hoy me besas, te alegras cuando me ves, te dejas tomar foto, te trepas encima de mí, y me gusta que lo hagas.
Te tengo un mes, pero te quedan 2 meses para que vuelvas. Sólo me queda disfrutarte, después de entregarte, sólo el destino sabrá si te volveré a ver. Yo espero que sí, no sé si seré un iluso, pero no tengo dudas que la ilusión de un padre.



viernes, 16 de diciembre de 2011

EL GRITO DE CAMPEÓN, SE ESCUCHÓ EN CHICLAYO.


Sólo dos equipos de provincia han sentido el placer, y orgullo de regresar a su ciudad y ser considerados héroes, hijos ilustres, ser admirados, adorados, por darle alegría a toda su ciudad. El Melgar de Arequipa en 1981 y el Unión Huaral, en 1989.
Hoy, el denominado “Ciclón del Norte” el Juan Aurich de Chiclayo, pudo sentir  esa sensación de llegar a la “Ciudad de la Amistad” como héroes, como reyes, como lo que son, CAMPEONES.
El equipo dirigido por el colombiano Diego Umaña, vino a Lima a ser historia, a proclamarse campeón, a virar la historia que nunca lo vio dar la vuelta, a llevarse la mística blanquiazul al norte y pintarlo de rojo vivo. Y vaya que lo hizo, a pesar de haber perdido el primer play off en el Elías Aguirre por 2 a 1, el Ciclón del Norte vino a Matute y con el triunfo por 1 a 0 con gol del “cachete” Zúñiga, prolongó a un tercer partido de definición, en el remozado Estadio Nacional.
Después de tanta vaivenes de que si se jugaba o no se jugaba, si se suspendía o no, exactamente 2 horas antes del partido, a las 2 de la tarde (el partido estaba programado a las 4:00 pm) el Ministerio del Interior dio luz verde para la final, a pesar de que la Municipalidad de Lima no quería que se jugara ya que aludía que el Estadio Nacional no contaba con la seguridad para un encuentro como éste.  Con media hora de retraso, y con centenares de gente en las afueras, el arequipeño, Victor Hugo Rivera, dio el pitazo inicial.
Los primeros 45 minutos fue un partido donde Alianza Lima tuvo las chances más claras de ponerse arriba en el marcador, con el cabezazo del argentino Fleitas, que Diego Penny sacó en la línea y los tiros de larga distancia de Visa y compañía hicieron figura al largirucho arquero.  En el segundo tiempo, ya con Ovelar en los vestuarios por lesión,  al equipo de Miguel Ángel Arroé se le notó que las ausencias de Montaño, Jayo y Bazán hacían más falta que las de Chiroque y Zúñiga en el  Aurich. En el segundo tiempo, el partido se tornó de ida y vuelta, las tácticas se fueron dejando de lado y los contra-ataques de los equipos tomó protagonismo en gras del coloso José Díaz. Terminado los 90 minutos, con el cero en los dos arcos, se empezó el tiempo suplementario.
Es ahí donde Diego Umaña mostró la sapiencia de un viejo zorro y de un gran entrenador,  y apostó por los tiros de los 12 pasos metiendo a Renzo Sheput para que tenga la pelota y ganen en la media cancha con Cicciliano y Merino.  Con el 0 a 0 después de los 30 minutos, la tribuna norte se preparaba para ser testigo principal de la gloria del ciclón.
Y es así como Edgar González, primero en patear el penal y - dicen el más importante – mandó literalmente la pelota a la tribuna,  Renzo Sheput adelantó a los chiclayanos, y de ahí en adelante la figura de Penny se engrandeció al taparle los penales a Trujillo y Vílchez, solo Soto pudo marcar. Cicciliano y Balbuena convirtieron sus penales en goles y con el 3 a 1 se consagraron campeones del Campeonato Descentralizado. Felicitaciones a un club que demostró que con trabajo, humildad y buen manejo dirigencial se puede llegar lejos. La ciudad de la amistad, hoy se volvió la ciudad del campeón.

jueves, 2 de junio de 2011

EL PIRATA QUE ANCLÓ EN LA U


Hasta el día de hoy, sigue siendo el goleador histórico de la “B” Nacional del fútbol argentino, y a sus 42 años lo tiene por primera vez como entrenado de su querido Atlético Tucumán. Fue goleador en el fútbol peruano en su primera temporada, y eso le basto para meterse en el bolsillo a la Trinchera Norte, al hincha crema, que 15 años después lo recuerda con mucho cariño. Adrián Czornomaz llegó a Universitario de la mano de aquel excelentísimo entrenador técnico, Eduardo Lujan Manera.
Un tipo espigado, con más pinta de modelo de pasarela que futbolista. Llegó en silencio, y como me dice antes de entablar la charla, no fue a “robar” al fútbol peruano. Fue a meter goles, y vaya que lo hizo.

Hace un par de años que se retiro del fútbol, y empezó a trabajar como asistente de Leonardo Madelón, estuvo en Gimnasia de La Plata, y en Quilmes, y hoy  por primera vez es técnico de Atlético Tucumán.
Previo al partido contra Almirante Brown, a jugarse en Buenos Aires, fui a buscarlo al hotel donde se estaba hospedando, y al ver que en mi mano tenía una camiseta color crema, se le lleno los ojos de nostalgia. Tanto así que al momento de cruzar las primeras palabras, y saludarnos le dijo a su asistente técnico te presento a mis amigos peruanos, donde vamos a trabajar algún día.

Muy amablemente accedió a la entrevista, y lo primero que nos dijo fue Si me nombras la palabra Perú, lo primero que se viene a la mente es la “U”, el cariño de la gente, lo bien que la pasé, el ceviche. Siempre guardo mucho cariño, fui hace 4 ó 5 meses a inaugurar un estadio y  a jugar un encuentro amistoso de veteranos así que me sentí muy bien, y ojala pueda volver pronto. Fueron las primeras palabras del “Pirata” antes de hondar en sus recuerdos por su paso por el balompié peruano, nos contó un poco sobre su actual club, y como llegó: “La verdad, es la primera que voy a trabajar como técnico principal, en un equipo muy importante del país, como Atlético Tucumán, quiero aprovechar ésta oportunidad que me dan los dirigentes, me siento realmente preparado y capacitado para ésta responsabilidad que tengo hace algunas semanas, por suerte nos ha ido bien, hemos ganado a Aldosivi, a Defensa y Justicia. El equipo va ganando confianza. Y porque decidió cortar el vínculo con Leo Madelón, y emprender por su cuenta su carrera como técnico: Las etapas se van cumpliendo, estaba muy bien con Leo Madelón, pero nos habíamos ido de Quilmes, Leo me comentó que se iba a tomar un tiempo de espera para volver a trabajar, y éstas propuestas a veces pasan una vez en la vida. Yo había jugado en Atlético Tucumán, fui ídolo en el club, llego la oportunidad y decidí tomarla.

En el año 96, el equipo crema tenía grandes figuras, fue un equipo arrollador, pero como dice Czornomaz sólo le falto el campeonato. Y es que tenía que luchar, en esa época, con el poderosísimo Sporting Cristal, que se quedó con la competencia ese año. Vaya paradoja, un año después Adrián se vestiría de celeste, aunque no le fue tan bien como con la crema y recuerdo su paso por el equipo “bajopontino”: Mi etapa en Cristal fue buena, recuerdo que salimos Sub-campeones de  la Copa  Libertadores. Pero lo que viví en la U, fue incomparable, sentirme ídolo en la calle, en el estadio, uno  eso uno nunca lo olvida, fue un año muy lindo, de muchos goles, de hacerle goles en el clásico a Alianza, a Cristal, no lo pudimos coronar con el campeonato y bueno después por distintas circunstancias no pude seguir. Irme de la U no dependió de mi realmente, sí me hubiera gustado quedarme, hasta último momento estuve esperando que se diera esa posibilidad y no se dio. Recién cuando Cristal ya había firmado el contrato conmigo, ahí apareció nuevamente Universitario, pero es revolver cosas y lo que ya pasó no tiene remedio, siempre miro para adelante. No salí campeón con la U, pero ojala como técnico, si algún día me dan la chance de dirigir, capaz q podamos ser campeones.

Dentro de su recuerdo tiene guardado uno de los mejores goles que hizo en su carrera, nada menos que al clásico rival. Éste periodista, a sus cortos 10 años, tuvo el privilegio de estar presente en ese clásico, que además fue el primero al que asistió. Cómo si no hubiera pasado mucho tiempo, el “Pirata” nos describe la jugada “Mi mejor gol se lo hice a Alianza, generalmente no le pegaba bien a la pelota y ese día enganche una bolea extraordinaria, un corrida de Paolo Maldonado por derecha, tiró el centro atrás y yo la tomé de aire, como venía y la clave en un ángulo arriba, estábamos perdiendo y ése fue el gol del empate. Fue muy importante.”

Dejó buenos amigos, y extraña demasiado la comida peruana, nos comenta que hasta ahora come el ceviche con pan, y recuerda que la primera vez que lo probó, junto a Paolo Maldonado, no le advirtió que era picante. Nos confiesa que no puede comer ají, y que ahora lo come con mucho limón, y claro, el pan infaltable. La última visita que hizo, comió también el tiradito y se confiesa fan de la comida peruana. 

Se dio tiempo también para hablar de la selección y de su cercanía de la Copa América, La selección peruano tiene un gran técnico como Markarian, seguramente van a estar mas ordenados, técnicamente siempre fueron muy buenos y hay que trabajas un poquito mas en el orden y en lo físico y seguramente van a dar que hablar.