martes, 9 de noviembre de 2010

Quemando Etapas.

Hace algunos meses me enteré de una noticia que me sorprendió mucho, me alegró por un lado pero, más me sorprendió por el otro. Uno de mis mejores amigos me confesaba que iba a ser papá, sí, me dijo que tenía que confesarme algo, que no se lo había dicho a nadie, y que antes de enfrentar a sus padres, me lo quería decir. Fue una gran noticia, recuerdo que mi brother no sabía que hacer, lo sentía un poco nervioso. Creo que si hubiera estado allá, con chela de por medio hubiéramos llorado de emoción, de alegría, de rabia. Pero, lo único que se me vino  a la mente fue decirle que no se ponga mal, que él, ya era un profesional, lo que sus viejos siempre quisieron, un gran médico, y que solamente se adelantó algunos años al proceso de vida.

Hace poco recibí una invitación de un baby showers. Sí, al parecer todo salió bien, en dos meses nacerá mi sobrinita, y aunque definitivamente me perderé el Baby showers, ojala Dios quiera, y la pueda conocer cuando esté en Lima. 
Días atrás, también me sorprendí con otro embarazo. Un amiga, ex enamorada del cole, cruzaba esa línea. Va a ser mamá. No me lo confirmó ella, pero por los nicks, y estado en el muro de la red social más famosa me enteré. Me asombré, y me puse contento. Fue una de las que me despidió cuando vine a Buenos Aires, junto mi hermanita Cinthya, hace ya 4 años. No sé si la veré ahora, sólo se que será una gran mamá, por el simple hecho de que es una gran persona y linda chica.

Hace algunos meses, me preguntaban cómo uno se daba cuenta que se estaba volviendo “viejo”. Y muchos me decían que cuando les daba fiaca arreglarse para ir a una fiesta, otros que cuando veían a chicos alistándose y haciendo lío en plena calle por el tan ansiado viaje a Bariloche. Creo, que hoy me doy cuenta que uno se está volviendo maduro, creo que es mejor que decir la palabra viejo, cuando se entera de amigos que van a ser padres, amigas que van a ser madres, enamorados que deciden pisar el altar y casarse, amigos que se quejan porque tienen ahora, que pagar cuentas, y deudas. Que trabajan para pagarse sus estudios, o para su familia.

Atrás quedaron los chismes de “sabes quién está saliendo con quién” ó las fiestas de quince años. Hoy, las fiestas son los baby shower de amigos, los matrimonios de otros, aunque hasta ahora me han invitado a dos, el primero de una amiga de la primaria que se casó y me invitó, pero por estar lejos no asistí, y la segunda de una de mis mejores amigas, Liliana, quién se casó este año y que tampoco pude estar presente.

La vida sigue avanzando, más amigos cierran su etapa adolescente y entran de lleno a la etapa adulta, a esa etapa con la que te encuentras con la verdadera responsabilidad. Atrás, y en un lindo recuerdo quedaran  las chacotas, los juegos, las jodas.

El próximo año, si Dios quiere, cumpliré 25 años. Un cuarto de siglo, y me veo tan lejos de la madurez. Pero aplaudo a los que están por ese camino, y los admiro, como admiro a mucha gente. Entre ellos a mi amigo Juank, que se que será un gran papá, y que si Dios quiere estaré el día en que nazca Camila, para celebrar como se merece.


1 comentario:

  1. No, nO, no me parece voy hablar como argentina .. porque les escribís a ellos?? jajaja !!! ... Nah mentira hermanito sabes que te queremos un montón y siempre estás considerado como si estuvieras aquí, sé que la distancia es difícil porque te pierdes de buenos y malos acontecimientos pero siempre detrás de un gran sacrificio hay una enorme recompensa y eso lo sabemos demás los dos !!! ya sabes si Dios quiere y todo sigue tan lindo como hasta hoy, el próximo año estaré por allá jodiendo la paciencia !!! te queremos mucho, y sabes que más que un gran amigo eres un gran hermano !!!

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